El gobierno ecuatoriano advierte que en los próximos once años la población de adultos mayores en el país se duplicará, al pasar de los 940 mil personas que hay en la actualidad, a 1,8 millones personas sobre los 65 años.
Ante este escenario, las autoridades del gobierno central, como de los GAD´s (Gobierno Autónomos Descentralizados) allanan el camino con la formación de una política pública de asistencia integral para mejorar la calidad de vida de este segmento de la población.
El coordinador de la Zona 8 del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), Jorge Estrella, precisó que a inicios del siglo XX las expectativas de vida eran de 40 a 45 años. Hoy en día está por encima de los 75 años. Los cálculos para el 2025 es que sea de 85 años, eso quiere decir que la población vive más y los estados deben tener más presupuesto.
En el caso de Ecuador, expuso, el gobierno impulsa una política integral en lo que es inclusión y se hace énfasis en la población vulnerable. A los adultos mayores hay en ejecución acciones como lo es las “Casas del Buen Vivir”.
La cobertura ahí ha venido aumentando en relación a años anteriores, por ejemplo, en el caso de las instalaciones de la ciudad portuaria de Guayaquil, en el 2013 la atención fue para apenas 1.800 personas y en este año más de 12.000 personas de la tercera edad.
El trabajo se lo desarrolla en tres áreas:
La residencial, que consiste en alojar a personas que están en extrema pobreza y viven en las calles. A ellos el Estado proporciona estadía confortable en las casas hogares.
También, la atención a los denominado “adultos diurnos”, quienes reciben terapia ocupacional, física y acompañamiento de trabajadores sociales y psicólogos que ayudan en los procesos y problemas que presentan ellos en su diario vivir.
Otro trabajo que realizan los adultos mayores tiene que ver con quienes tienen incapacidad física que no pueden movilizarse a los centros. Aquí los adultos mayores son visitados en sus residencias.
La mayor cobertura que tienen los adultos mayores en Ecuador está en el aseguramiento no contributivo que representan beneficios a 67.330 personas que reciben una pensión permanente del Estado.
“Eso es parte de la una garantía constitucional. Ellos no están sujetos a la temporalidad, como sí lo están las personas que reciben el Bono de Desarrollo Humano que pierden el beneficio cuando cambia su quintil de vida. La ayuda económica la perciben por el resto de su vida”, dijo Dalid Palomeque, del área de protección especial del Mies.
El requisito para acceder al aseguramiento es tener más de 65 años y no estar afiliado a ningún tipo de seguro. Ellos automáticamente son beneficiarios de una pensión por 50 dólares.
Los beneficios adicionales que reciben es el pago de la mitad del valor de los servicios básicos y espectáculos públicos, así como otras exoneraciones de varios impuestos y la devolución del Impuesto Valor Agregado.
Mariano Paredes, septuagenario, aseguró que percibe un cambio en la atención al adulto mayor, no solo por parte del gobierno, sino de la propia sociedad. “Las personas procuran que tengamos una atención privilegiada en la columna de los bancos, que no esperemos de pie, que no paguemos más de la mitad del servicio. Es un cambio lento, pero que ahora lo vemos”.
Este criterio es compartido por Victoria de Muriel, jubilada, quien sostiene que “ahora ya pueden afiliarse al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social sin tener que pasar el examen que era un bloqueo para recibir atención médica; además, quienes están en abandono total por circunstancia de la vida tienen una pensión vitalicia por 50 dólares que es una ayuda para el hogar que los acoge”.
La funcionaria del área de Protección Social del Mies afirma que el Estado trabaja y garantiza poniendo en práctica la política pública de protección social y en esa camino hay que trabajar para estar preparado por el crecimiento de la población adulta mayor que se duplicará para el 2025.
Fuente: ANDES - 19/5/2014.
http://www.andes.info.ec/es/noticias/poblacion-adultos-mayores-duplicara-2025-ecuador.html