“Las personas de edad contribuyen de distintas maneras al desarrollo económico y social. Sin embargo, se las sigue discriminando y excluyendo de la sociedad. Debemos superar estos prejuicios para conseguir que la población sea activa social y económicamente, esté protegida y envejezca de forma sana.”
1 de octubre de 2014.
Las personas de edad tienen un papel cada vez más importante en la sociedad a medida que aumenta su número y mejoran los servicios de salud en algunas partes del mundo.
Se prevé que el número de personas de edad aumentará más del doble en todo el mundo, de 841 millones en 2013 a más de 2.000 millones en 2050. Ese año, casi 8 de cada 10 personas de edad del mundo vivirá en las regiones menos desarrolladas.
El aumento constante de la longevidad humana constituye uno de los mayores cambios y desafíos de nuestro tiempo. Y si el mundo no se adapta a las nuevas tendencias demográficas será difícil lograr un futuro sostenible y seguro en el que las personas de todas las edades lleven una vida plena.
Las personas de edad contribuyen de distintas maneras al desarrollo económico y social. Sin embargo, se las sigue discriminando y excluyendo de la sociedad. Debemos superar estos prejuicios para conseguir que la población sea activa social y económicamente, esté protegida y envejezca de forma sana.
La agenda para el desarrollo después de 2015 ofrece una oportunidad histórica para que las Naciones Unidas y sus Estados Miembros fortalezcan los derechos de las personas de edad y su papel en la sociedad, como parte integral de nuestro compromiso de «no dejar a nadie atrás».
En este Día Internacional, aliento a los gobiernos y los pueblos de todo el mundo a que aseguren la plena participación de las personas de edad en la sociedad al tiempo que protegen sus derechos y su dignidad.