México experimenta un crecimiento de la población en edad avanzada, como reflejo del proceso de transición demográfica, causada por el descenso de la mortalidad y de la fecundidad. El proceso de envejecimiento demográfico significa que transitamos de una población joven a una más envejecida.
Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas
28 de agosto de 2016
El envejecimiento de la población de México se hace evidente al comparar los porcentajes de población en los cohortes de edad, en 2015 la población menor de 15 años representó 27.4% del total, la que se encuentra entre los 15 y 64 años, 65.4%, y la población en edad avanzada o de 65 años y más, 7.2%. En el año 2010, la participación de estos grupos de edad era 29.3, 64.4 y 6.2%, respectivamente. Este es un proceso complejo que requiere revisarse con la mayor relevancia para hacer frente a las necesidades de la población anciana en particular las relacionadas con la cobertura de salud y el sistema de pensiones.
La población indígena no ha estado al margen del proceso de crecimiento de la población en edad avanzada. Con base en los resultados de la Encuesta Intercensal 2015, la CDI contabiliza 12 millones 25 mil 947 indígenas de los cuales, la población de 60 años o más representa el 10.4%, que significa un incremento de casi 3%, con respecto al valor registrado en el año 2000, de 7.3%.
La situación de los adultos mayores en los pueblos indígenas se dificulta porque en su mayoría viven en regiones de pobreza y alta marginación, con dificultades para acceder a los servicios que les permitan cubrir sus necesidades como la atención a la salud, o el acceso a fuentes de empleo o ingresos.
Los adultos mayores indígenas suma 1 millón 247 mil 673 personas. La mitad de ellos son parte de sólo tres pueblos nahua con 315,370 personas; maya 197,853 y zapoteco 107,724 cuyo porcentaje en relación al total de adultos mayores indígenas es, respectivamente, 25.3%, 16% y 8.6%.
Únicamente en 13 grupos etnolingüísticos la población indígena en edad avanzada suma más de 10,000 pero menos de 100,000: mixteco, otomí, totonaco, mazahua, tseltal, tsotsil, mazateco, huasteco, tarasco, ch’ol, chinanteco, mixe, mayo y tlapaneco; en 49 pueblos la población adulta mayor es menor a 10,000 personas, entre ellos en 29 son menos de 1000. En los awakateko cuya población suma 31 personas no se ubica ninguna persona en edad avanzada.
Por otro lado, en cada grupo el porcentaje de adultos mayores es distinto en 29 pueblos la población adulta mayor representa entre 10.7% y 29.1%, valores mayores con respecto a la media nacional de 10.4%, entre los cuales se ubican los seis pueblos que cuentan más de 50 mil adultos mayores nahua, maya, zapoteco, mixteco, otomí y totonaco.
Los estados donde se concentra principalmente el mayor número de adultos mayores indígenas son: Oaxaca, Veracruz, Yucatán, Puebla, Chiapas, México, Hidalgo y Guerreo. En conjunto estos estados concentran 78.5% de la población indígena adulta mayor.
Los estudios sobre el tema señalan algunos efectos documentados de la transición demográfica en la población indígena: a) cambio en los roles que tradicionalmente asumía la población adulta mayor indígena, debido a que sus roles de autoridad se transfieren a población en edad media, desplazando a los viejos del poder gerontocrático; b) mayor sobreviviencia de personas analfabetas y monolingües, y c) vejez diferencial en cuanto estatus económico, niveles de salud y actividad productiva.
Los adultos mayores indígenas hablantes de lenguas originarias suman 1 millón 131 mil 936 personas y representan 90.7%, a diferencia de los hablantes en la población indígena total que suman 7 millones 382 mil 785 de personas y significa 61% de la población indígena total. Además cuatro de cada cinco adultos mayores hablantes de lengua son monolingües y solo 18% habla además el español.
Con relación al tema educativo, la mitad de los adultos mayores son analfabetas porcentaje que se incrementa a 60% entre las mujeres y disminuye a 38% entre los hombres. El analfabetismo ha disminuido consistentemente en los últimos 15 años a nivel nacional y en la población indígena se redujo 11 y 10%, respectivamente; no obstante entre los hombres indígenas disminuyó sólo 8.8%.
La atención a la salud es uno de los componentes básicos de las condiciones de bienestar de la población de cualquier país. Y es sustantiva para la calidad de vida de población en edad avanzada. En años recientes en el país se han implementado acciones encaminadas a otorgar este servicio a la población al margen de que mantenga o no una relación laboral con alguna organización o empresa, con la finalidad de lograr la cobertura universal de los servicios de salud. A nivel nacional entre 2000 y 2015 el porcentaje de población adulta mayor que declaró estar afiliada a servicios de salud pasó de 48 a 86.3%. Entre la población indígena se incrementó 60 puntos porcentuales al pasar de 23.6 a 85.4%. Lo que muestra avances en esta materia.
Finalmente destaca un proceso de masculinización del envejecimiento en la población indígena en algunos grupos etnolingüísticos. En 26 grupos etnolingüísticos en la población en edad avanzada hay más hombres que mujeres, entre ellos destacan: los mayas, tseltal, cho’ol, y huasteco. Asimismo, entre los pueblos hablantes de náhuatl, mixteco, zapoteco, otomí, mazahua, mazateco, purépecha, mixe, tlapaneco, amuzgo, y chatino, cuya población indígena se ubica entre 70 mil 2.8 millones de personas, hay más mujeres que hombre entre las personas adultas mayores.
Disponible en:
https://www.gob.mx/cdi/articulos/indicadores-sobre-adultos-mayores-indigenas-de-mexico