No existen estrategias para su cuidado.
Los datos son escasos y la información prácticamente inexistente sobre las mujeres mayores.
Elsa Montiel
La situación de las mujeres mayores en México es preocupante, están invisibilizadas para la sociedad y tampoco hay una política de Estado frente a las consecuencias del envejecimiento, ya que no existen estrategias para su cuidado ni tampoco se toman en cuenta otras condiciones de vulnerabilidad, ejemplo de ello las mujeres mayores indígenas, en reclusión, migrantes o del colectivo LGBTI.
En la presentación del primer informe sombra sobre mujeres mayores, el año pasado en la IX Informe Periódico de México ante CEDAW, promovido por el Comité Ajusco de Derechos Humanos que preside Angelita Fuentes Vera, se puso de manifiesto que las mujeres mayores enfrentan tres graves problemas adicionales; el despojo, el abandono y el feminicidio.
Angelita Fuentes Vera denunció que para el gobierno la situación de las mujeres mayores no son prioridad, ya que la información que genera el Estado no se encuentra desagregada por sexo, mucho menos por edad.
La falta de datos oficiales revela una sistemática invisibilización de las mujeres mayores, ya que, en el señalado Informe, en ningún momento se mencionó la situación de las mujeres mayores.
También se refirió que este grupo etario forma parte de la compra y coacción del voto aunque no hay un estudio que dé cuenta del impacto en las mujeres y en las de mujeres mayores en particular.
Fuentes Vera destacó que los datos son escasos y la información prácticamente inexistente sobre las mujeres mayores, no se observa la perspectiva de derechos humanos ni de género en la poca información que se encuentra y en las políticas públicas impera más una visión asistencialista.
Además de reconocer que la única oferta para la compleja problemática son las políticas clientelares de ayuda económica, que tampoco llegan a todas las personas y mujeres mayores en particular.
Agregó que la interpretación negativa de la vejez, en la que se valora la juventud como un sinónimo de productividad genera maltrato, abuso, despojo, violencias y abandono. Cruzada con otras formas de discriminación como la de género, origen étnico y desigualdad, potencializan un grave problema de exclusión social.
Por ello que demandó dar claridad y revalorar la vejez para generar una cultura de reconocimiento y ejercicio de los derechos humanos.
También se refirió al maltrato actual de las mujeres mayores que es el despojo por parte de sus hijos y familiares, actualmente llevan 17 casos de personas mayores, de los cuales 11 son mujeres mayores. Contrariamente a lo que se pensaba, el hogar no siempre es el lugar más seguro para las personas mayores.
Detalló que el Comité de Derechos Humanos Ajusco A.C. es una organización de la sociedad civil fundada en 1987, que surgió para dar voz a siete colonias del Ajusco en sus demandas sociales. “Al paso del tiempo, dijo Fuentes Vera, envejecimos y actualmente promovemos los derechos de las personas mayores a nivel local, nacional e internacional.”
Fuentes Vera citó las palabras de la indígena Eufrosina Cruz que contracorriente ocupó un cargo público en su comunidad, que dijo: “Que el género no sea el límite de la libertad, sino el equilibrio de la sociedad”.
Somos parte del grupo intersectorial que busca la adhesión del Estado Mexicano a la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores, que falta por ratificar el gobierno mexicano.
En la ratificación del tratado internacional coincidió Joaquín Narro Lobo, secretario técnico del Consejo Consultivo de la Ciudad de México, quien demandó a los asistentes a reflexionar sobre la discriminación de la vejez que empieza desde la sociedad misma porque así nos lo enseñaron, hay que pensar en llegar a la vejez en buenas condiciones y con dignidad, dijo.
Por su parte, Gloria Ramírez, de la Cátedra Unesco sobre Derechos Humanos de la UNAM, quien se alió con diversas organizaciones feministas, representantes de la academia y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para presentar los informes sombra en Ginebra, Suiza se preguntó ¿Por qué México no cumple cabalmente con los tratados internacionales?
También reflexionó que la Ley no cambia la vida de la sociedad si no va acompañada de mecanismos o instrumentos como las recomendaciones a México por la CEDAW.
Entre las recomendaciones de la CEDAW a nuestro país, destacan la Recomendación General 27 que en sus puntos señala:
Llevar a cabo acciones contundentes y permanentes para que sea erradicada la cultura del desprecio hacia la vejez.
Promover la cultura de protección a los derechos de las mujeres mayores y no solo la perspectiva asistencialista, con la que se atiende a esta población.
Generar datos y estadísticas encaminadas a conocer la realidad de la situación de las mujeres mayores y con ello levar una política pública encaminada a proteger y garantizar los derechos de las mujeres mayores.
Integrar la perspectiva interseccional que incluya a las mujeres mayores indígenas, rurales, migrantes y de la comunidad LGBTI, entre otras condiciones.
Fuente: SemMéxico – 27/03/2019.
https://www.semmexico.com/gallery-post.php?id=7721