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Uruguay. Violencia contra las personas mayores: especialistas en vejez señalan insuficiencia de políticas públicas en relación a la demanda

Jueves, 20 de Junio de 2024
Políticas y Derechos

“En el marco del Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato a la Vejez, el Ministerio del Desarrollo Social (Mides) y la Intendencia de Montevideo (IM) difundieron algunas cifras sobre las situaciones de abuso y maltrato de las que son víctimas las personas mayores. Para profundizar en las raíces de las violencias contra esta población, la diaria conversó con especialistas en vejez, quienes señalaron la insuficiencia de las políticas públicas para abordarlas.

El Mides informó que durante 2023 el servicio de atención a personas mayores en situación de abuso y/o maltrato, que funciona en la órbita del Instituto Nacional de las Personas Mayores (Inmayores), hizo 178 intervenciones. De ese total, 79% de las afectadas eran mujeres y 48% de los casos eran mayores de 79 años. El promedio fue de 78 años.

El tipo de maltrato denunciado fue principalmente psicológico (en más de la mitad de los casos), seguido por maltrato físico, abandono y, por último, abuso patrimonial. Del total de las denuncias recibidas, en 44% la víctima sufrió un tipo de abuso y/o maltrato y el 42% dos, según el Mides. A su vez, “la mayor parte de las agresiones las reciben de personas allegadas, principalmente de hijos e hijas”.

Por otra parte, el servicio de atención a personas mayores de 60 años de la IM, que se implementó en octubre de 2023, hasta ahora recibió 190 casos “de muy diferentes características”, según informó la comuna, e hizo que se transforme “sustancialmente la forma de intervención”, con la incorporación de una dinámica de abordaje con tiempos más prolongados y utilización de diversas estrategias, de acuerdo con las características de cada situación.

La mayoría de las denuncias requirieron múltiples intervenciones y orientación interdisciplinaria, incluyendo trabajo en territorio como una dimensión sustancial del abordaje. Respecto de quienes denuncian, la IM detalló que “gran parte de las consultas son realizadas por mujeres”, ya sea para sí o para otras mujeres (amigas, vecinas, madres, hijas).

En casi 80% de los casos se constató que es la propia persona mayor en situación de maltrato la que se comunica o acude a solicitar asesoramiento o intervención. Las personas que consultan pertenecen a “todos los estratos socioeconómicos” y a todos los barrios de Montevideo.

Dependencia y violencia

Especialistas en vejez consultados por la diaria indicaron que los distintos tipos de violencia ejercida sobre las personas mayores tienen diferentes raíces, como, por ejemplo, la concepción social sobre la vejez y la falta de políticas públicas que establezcan parámetros para los cuidados, que, entre otras cosas, eviten las situaciones de abuso.

Robert Pérez, psicólogo especializado en vejez, explicó que la violencia sobre esta población puede ser psicológica, física o económica y relacionarse con distintos tipos de abuso, entre ellos, patrimonial o sexual. Entre los distintos tipos hay algunos “más fáciles de visualizar”, por ejemplo, la violencia psicológica, que es “la principal causa de denuncia” en Uruguay y en otros países.

Según Pérez, es necesario contextualizar este tipo de violencia en un momento con “vínculos sociales muy violentos e intolerantes, sobre todo con los más vulnerables”. Agregó que el ejercicio del maltrato implica una forma de dominación y menoscabo a la autoestima del otro, lo que tiene que ver con las relaciones de poder que se establecen.

Esto debe ser pensado, a su vez, en un contexto en el que las personas mayores están en “situaciones vulnerables” a causa de ingresos económicos bajos, relaciones familiares de dependencia u otros motivos, y también en el marco de una concepción social que tiende a “patologizar la vejez”.

Sobre la relación entre dependencia y violencia, el psicólogo agregó que quienes están, por ejemplo, en establecimientos de larga estadía para personas mayores (Elepem) tienen mayor relación de dependencia y además se encuentran en un lugar en el que se expresa con más fuerza la concepción de patologización de la vejez, porque en muchos casos “funcionan como un hospital, cárcel o manicomio más que como centros de cuidados”.

El debe de las políticas públicas

Sobre las políticas públicas destinadas a atender las problemáticas de esta población, Pérez opinó que si bien Uruguay con el transcurso del tiempo fue construyendo algunas políticas pioneras que dieron “un marco global” a nuestra legislación, como la creación de Inmayores y la temprana incorporación a la Convención Interamericana de Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores, para abordar el tema de la violencia hacia las personas mayores “aún falta mucho”.

El psicólogo consideró que “las políticas actúan como reacción”, pero no apuntan a las bases sobre las que se producen las violencias, por lo que “no hay la suficiente prevención”. Además, las políticas establecidas tienen en parte una visión “alineada con el siglo pasado”, y “es necesario que adquieran “una visión enfocada desde los derechos humanos”.

En esta línea, el especialista detalló algunas ideas que a su entender sería bueno implementar. Estas incluyen cambiar los imaginarios sociales y pensar en campañas de sensibilización que generen “otras imágenes de las vejeces”; proyectar un sistema de cuidados que tenga apoyos efectivos y que trate el tema de la violencia y el maltrato; incorporar estas problemáticas en la formación de los profesionales e incentivar la participación de las propias personas mayores en distintos espacios para que mejoren su autoestima y se sientan respetados y útiles.

En la misma línea, Sol Scavino Solari, doctora en Sociología, investigadora y docente de la Universidad de la República especializada en desigualdades de género y cuidados, indicó que las políticas actuales son insuficientes “en relación con la demanda de cuidados de las personas mayores” y la prevalencia de los cuidados no remunerados.

Para Scavino Solari, “el Estado no desarrolla de manera directa políticas como centros de larga duración, vinculados con otras políticas de cuidados y del sistema sanitario, así como con los entornos urbanos que los rodean”. Respecto de las políticas de cuidados del Sistema Nacional Integrado de Cuidados (SNIC) dirigidas a personas mayores, agregó que “las propias coberturas hablan de una ausencia del Estado”, en primer lugar, porque “se focalizan” en dependencias y edades.

Algunas de las prestaciones del sistema son gratuitas y otras en régimen de copago, como el programa de asistentes personales del Mides. De este programa, “que no alcanza a más del 35% del total de la población que delimita” (80 años y más con dependencia severa, excluyendo la moderada), el porcentaje “se reduce a cerca de 10%” cuando se considera a las personas de 70 años y más, apuntó.

Por otra parte, “el incipiente desarrollo” de nueve centros de larga estadía por parte del SNIC, sumado a otros dos, “no logra cubrir a un 1% del total de las personas mayores de 65”, en particular a aquellas con dependencia leve y moderada a las que se dirigen, acotó la experta. Por último, la teleasistencia, un servicio que “permite que las personas mayores de 70 años avisen a su familia, vecinas/os o servicio médico ante cualquier incidente que ocurra en su hogar”, tampoco cubre a más del 5% de la población a la que se dirige.

Sobre los Elepem, Scavino Solari consideró que si bien “han avanzado en su regulación”, aún son provistos principalmente por prestadores privados, sin estar disponibles para el total de la ciudadanía, y aún mantienen “importantes retos en relación con el modelo hospitalizado y aislado”. A su vez, las situaciones de violencia en los mundos “de puertas adentro” son muy difíciles de abordar y no hay legislación de avanzada sobre el trabajo de cuidados domiciliario e institucional en este sentido.

En estos centros trabajan cuidadoras “cuya formación consta de un curso básico que abarca temas aún muy generales, y la formación se dirige a todas las cuidadoras, independientemente de si trabajarán con niños o personas mayores, así como de los distintos orígenes de la dependencia” y “no se prevén situaciones particulares”, por ejemplo, el aumento de horas de cuidados según el grado de dependencia del residente, profundizó.

Si bien durante los últimos años “se avanzó mucho en la habilitación” de estos centros, “si se analizan con detalle” los criterios utilizados para evaluar la “calidad de los cuidados” y qué tipo de políticas la promueven, son cuestionables en relación con las dimensiones que consideran, aseguró la socióloga. Muchas veces, “aunque la persona tenga un salario que le permita acceder” a un centro de larga estadía, “el buen cuidado no está necesariamente asegurado”, sostuvo.

Promover “el buen trato”

En la sociedad civil hay distintos grupos que velan por el bienestar de las personas mayores. Uno de ellos es el Movimiento de Familiares y Residentes de Elepem, fundado en 2020 e integrado por más de 70 familiares y residentes de larga estadía y profesionales de distintas áreas. Su objetivo es “fomentar el cuidado con perspectiva de derechos”, para lo cual se organizan actividades y talleres que promueven “el buen trato” por parte de los cuidadores y fomentan la concientización de los derechos que poseen los residentes, contó a la diaria Alicia Di Bartolomeo, integrante de la mesa coordinadora del movimiento.

En los Elepem “se agudiza la perspectiva deficitaria” sobre la vejez “por el contexto de la institución”, sostuvo Di Bartolomeo, y contó que en el movimiento no se habla del maltrato, sino que “se promueve el buen trato”. Por otra parte, si bien el grupo no gestiona denuncias de maltrato, sí colabora con la derivación a Inmayores. A su vez, se asesora a las familias que se acercan a pedir información sobre lo que es necesario tener en cuenta a la hora de ingresar a una persona mayor a un establecimiento.

FUENTE: ladiaria.com.uy - 19/6/2024

https://ladiaria.com.uy/salud/articulo/2024/6/violencia-contra-las-personas-mayores-especialistas-en-vejez-senalan-insuficiencia-de-politicas-publicas-en-relacion-a-la-demanda/?utm_source=newsletter&utm_medium=email&utm_campaign=manana