(Publicado por la RLG el 18-03-2002)Ciudad de México D.F. México.
16 al 19 de octubre del 2001.
Organizada por:
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH)
El Instituto Nacional de la Senectud (INSEN)
La Asociación de Jubilados y Pensionados "Dr. Lavista" A.C.
La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal
La Junta de Asistencia Privada
Cáritas Bienestar del Adulto Mayor I.A.P
Las delegaciones de Alvaro Obregón, Benito Juárez, Cuauhtémoc y Venustiano Carranza
PROGRAMA
Martes 16. Inauguración. Delegación Alvaro Obregón. Tema: Protección Social y Jurídica.
Miércoles 17. Delegación Venustiano Carranza. Tema Mejorando la calidad de vida.
Jueves 18. Delegación Cuauhtémoc. Tema Cultura y recreación.
Viernes 19. Delegación Benito Juárez. Tema Ocupación. Clausura del evento.
CEREMONIA DE INAUGURACION.
MENSAJES DE LOS MIEMBROS DEL COMITÉ ORGANIZADOR
Lic. Consuelo Olvera Treviño - Directora de Capacitación de la Sria Técnica del Consejo Consultivo de la CNDH.
Lic. Aurora Vergara de Espina - Pta. Del Patronato DIF en la Delegación Benito Juárez.
Lic. Juan Carlos González Llamas - Subdirector de Investigación y Desarrollo Social del Instituto Nacional de la Senectud.
Pbro. Manuel Zubillaga Vázquez. - Director de Cáritas Arquidiócesis de México
Lic. Consuelo Olvera Treviño
Directora de Capacitación de la Sria Técnica del Consejo Consultivo de la CNDH
16/oct./2001
Muy distinguidos miembros del presidium; apreciables asistentes: Señoras y señores:
"No hemos de preocuparnos de vivir largos años, sino de vivirlos satisfactoriamente; porque vivir largo tiempo depende del destino, vivir satisfactoriamente de tu alma".
(Séneca, cartas a Lucilio).
En nombre de la Dra. Susana Thalía Pedroza de la Llave, Secretaria Técnica del Consejo Consultivo de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, y en el mío propio, me es muy grato expresar a ustedes nuestro beneplácito al constatar que la conjunción de esfuerzos y voluntades es posible a efecto de promover el reconocimiento y el respeto de un grupo fundamental de nuestra sociedad: los adultos mayores.
Desde la perspectiva de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, es primordial la reafirmación de las personas como sujetos de derecho, independientemente de su rango de edad, sus características físicas o demás condiciones y particularidades; es urgente que recuperemos el amor de la vida humana y el reconocimiento de la dignidad de las personas.
La realización de la Segunda Jornada "Por los Derechos de las Personas Adultas Mayores", es una excelente ocasión para reflexionar que este tema es muy importante, no sólo porque en el siglo XXI la estructura poblacional del planeta vivirá una transformación demográfica hacia su envejecimiento, en donde según los cálculos estimados por la Organización de las Naciones Unidas, en el año 2030 la tercera parte de la población de varios países industrializados será mayor de 60 años.
Sino también, porque en la actualidad las personas viven más que en cualquier otra época, los más recientes informes del PNUD sobre el Índice de Desarrollo Humano revelan que la esperanza de vida se ha elevado ya hasta los 70 años en algunos países, los avances de la medicina auguran que puede prolongarse aún más la longevidad en la medida en que se mejoren las condiciones de salud, higiene y nutrición de las personas.
Hasta aquí todo muy bien, pero como no se trata sólo de vivir largos años sino de vivirlos satisfactoriamente como lo afirma Séneca, esto nos lleva necesariamente a vincular los años vividos con la calidad de vida y ésta, con el cumplimiento de los derechos humanos.
Las exigencias de la vida moderna y la dinámica de las sociedades contemporáneas nos han colocado en una encrucijada de la cual no ha sido fácil salir; pues hoy se pone el énfasis en todo, menos en lo verdaderamente importante: las personas. Al ser humano de hoy no se le valora, se le mide en términos de productividad y rendimiento, y en ese sentido resulta abominable observar con que facilidad éste puede ser desechado en cualquier momento.
Esta pavorosa tendencia de cosificar al ser humano, de darle trato de herramienta, de darle un sentido de utilidad, de jugar con él al hoy me sirves, mañana no; ahora te tomo en cuenta, después te ignoro, te invisibilizo y hasta te deshecho; practicas que han hecho de esta tendencia una de la que más ha vulnerado transgredido a muchos grupos humanos de los que no están exentos los adultos mayores.
No quiero detenerme en el recuento de las transgresiones, por el contrario esta Segunda Jornada nos posibilita la oportunidad de acceder a una comprensión mucho más amplia y profunda de lo que es la humanidad y su dignidad común.
Uno de nuestros desafíos actuales está en reconocer a la dignidad sin discriminaciones y clasificaciones de ningún tipo, entender que ésta (la dignidad) no es compatible con ninguna jerarquización de las formas del ser humano.
Los adultos mayores, como todos los seres humanos, tienen características que le son propias, por lo tanto requieren de condiciones que posibiliten la realización plena de sus necesidades, exigencias y demandas.
Es urgente que nos eduquemos para el reconocimiento y el respeto de la diversidad humana; comprender por ejemplo que algunos adultos mayores ya no tienen ese andar rápido, acelerado y en ocasiones atropellado; pero que ahora caminan con mayor seguridad aunque flaqueen sus piernas, porque hoy andan con el paso lento y suave producto de la sabiduría que se adquiere con el transcurrir de los años, un andar tranquilo y pausado en el que se concreta la bella frase del poeta León Felipe "lo importante no es llegar sólo y antes, sino con todos y a tiempo". Este andar generoso y solidario con el resto de la humanidad, porque nos da la oportunidad de coincidir con ellas y con ellos en el camino, y no pasar de largo indiferentes y ajenos ante las necesidades de los demás.
Todas y todos tenemos el compromiso ético de trabajar conjuntamente para garantizar mejores condiciones de vida digna para los adultos mayores, favorecer su participación en la sociedad y brindar los elementos que permitan una mejor autorrealización de su persona; para ello, también tendremos que disponernos a recuperar su experiencia, a nutrirnos de su memoria y aprender a dialogar con sus pausas y sus ritmos. Estar dispuesto a convivir con nuestras diferencias y sobre todo como lo afirma Ernesto Sábato tener la enorme pasión que nos permita "celebrar la vida", y nada más que eso: la vida.
Esta Segunda Jornada abordará temas fundamentales para garantizar estas condiciones de vida digna para los adultos mayores como lo son: la protección social y jurídica; la cultura y recreación; mejorando la calidad de vida y ocupación. Dispongámonos pues a participar con entusiasmo y vigor de este esfuerzo conjunto.
Gracias.
Lic. Aurora Vergara de Espina
Pta. Del Patronato DIF en la Delegación Benito Juárez
Dicen los estudiosos de los fenómenos sociales que cuando en una comunidad están bien tres grupos de ciudadanos, entonces se puede decir que esa comunidad goza de salud social. Esos tres grupos son los niños, las mujeres y los adultos mayores. Por esa razón, un gobierno no debe escatimar esfuerzos en procurar que sus ancianos tengan una forma de vida de la mejor calidad posible.
Pero esa reflexión es incompleta. A los adultos mayores hay que procurarlos no para mejorar nuestros índices estadísticos de bienestar, sino porque se lo merecen. Porque es lo más natural y conveniente que en la sociedad las personas como ustedes estén bien atendidas, en la medida de lo posible.
Claro que esta es una tarea que en parte le toca al gobierno. Pero de ninguna manera es exclusiva del mismo. Creo el bienestar de los adultos mayores es una atribución y una responsabilidad de esa pequeña gran sociedad que es la familia. En efecto, cuando la familia está bien, los adultos mayores están bien y viceversa. En ese sentido, lo único que tiene que hacer el gobierno es cuidar que ese círculo virtuoso siga funcionando por el bien de la comunidad entera.
Y ¿Cómo le hace el gobierno para cuidar ese círculo virtuoso? Pues creando oportunidades como en las demás áreas de la vida pública. Esa es la misión de un gobierno moderno. Para los adultos mayores, el gobierno tiene que crear oportunidades para que trabajen y se den cuenta de lo útiles y productivos que siguen siendo; para que se diviertan, aprendan, tengan mejor salud, en fin, puedan sentirse plenos, y que en el seno de sus familias estén ustedes en condiciones de seguir aportando lo que les toca contribuir en beneficio de ese círculo virtuoso del que les hablaba hace unos instantes: su propia familia.
Pero todo lo que haga o pueda hacer el gobierno tiene una limitante muy clara: no debe hacer nada que las personas y las familias puedan hacer por sí mismas, porque eso seria suplantarlas, sustituirlas. Eso equivaldría a negar la eminente dignidad de los seres humanos. Eso significaría que el gobierno no cree en la capacidad de las personas, sean niños, adultos o ancianos; hombres o mujeres. Por eso no puedo concluir mi intervención sin pedirles fraternalmente que nunca abandonen esa gran responsabilidad que tienen como ancianos en la comunidad. Háganse siempre escuchar, que todos tenemos mucho que aprender de ustedes.
Lic. Juan Carlos González Llamas
Subdirector de Investigación y Desarrollo Social del Instituto Nacional de la Senectud
En representación del Licenciado Pedro Borda Hartmann, Director General del Instituto Nacional de la Senectud, los saludo con mucho gusto y muy cordialmente.
Para el Instituto son de gran relevancia estas Segundas Jornadas para promover los derechos humanos de las personas de 60 años y más.
El Instituto, tiene una larga historia en temas que en el momento están muy en boga, la transición demográfica y el proceso de envejecimiento demográfico y en todas las implicaciones que de él se están derivando y se derivarán en el corto, mediano y largo plazo, son muchas las acciones que se tienen que tomar, que se han tomado y que se tendrán que tomar en el futuro para buscar que las personas de 60 años y más en este país tengan una mejor calidad de vida.
En el momento hay alrededor de 7.1 millones de personas de 60 años y más, edad en la que en México se señala como el inicio de la vejez, y las instituciones tanto públicas como privadas, tenemos que procurar desde diferentes alternativas buscar su bienestar y una mejor calidad de vida,
Uno de los aspectos importantes y sumamente relevante es éste, el tema que hoy nos ocupa, los derechos de las personas de edad avanzada, pero no solamente tocarlos y una vez al año tratarlos en un foro, sino de manera cotidiana.
Hace muchos años el Instituto inició sus primeras acciones con la Comisión Nacional de Derechos Humanos con una función de Cine Debate, discutiendo y analizando, conjuntamente con las personas de edad, lo que representan sus derechos y como debemos de respetarlos quienes estamos en otras generaciones. Para el Instituto han sido dos de los puntos sustanciales de trabajo en el terreno de los derechos humanos.
- Trabajar primero en el terreno educativo de la población de 60 años y más dándoles a conocer cuales son esos derechos humanos que tienen y a los que deben tener acceso en la vida, pero también educarlos en cómo hacer respetar estos derechos humanos en su actuar cotidiano, en su vida diaria.
- Otro punto importante para el Instituto ha sido trabajar con la población de profesionales técnicos que atienden a las personas de edad avanzada en los diferentes servicios sociales y asistenciales de la Institución primeramente, y de otras instituciones que también derivan servicios a la comunidad de 60 años y más.
Creo que con estas dos vías estamos trabajando de manera que creemos un círculo virtuoso para poder generar en este terreno de los derechos humanos mejores condiciones, educando a las personas de edad avanzada para que sepan exigir sus derechos y también educando a otras poblaciones.
¿Cuáles han sido las acciones concretas del Instituto en este terreno?
Conjuntamente con la Comisión Nacional de Derechos Humanos, y con la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, se han impartido cursos, seminarios, teatro guiñol, dramatizaciones, cine debate tanto en los Clubes de la Tercera Edad del INAPLEN de la Ciudad de México, como en los estados de la República. Por eso, nos da mucho gusto formar parte del Comité Organizador de estas Segundas Jornadas por los Derechos Humanos de las Personas Adultas Mayores.
Un saludo, del Licenciado Pedro Borda Hartmann, Director General del Instituto.
Muchísimas gracias.
Pbro. Manuel Zubillaga Vázquez.
Director de Cáritas Arquidiócesis de México
Señoras y señores:
Cáritas Bienestar del Adulto Mayor, I.A.P. se siente honrada de estar aquí esta mañana, para expresar y promover, junto con todos ustedes a lo largo de estos días de trabajo, la necesidad de respetar los derechos de las personas adultas mayores.
Esta reunión para nosotros, como organización oficial de la Arquidiócesis de México, dedicada a la atención de los envejecientes, una gran oportunidad de cumplir con nuestra misión de cooperar con todos los esfuerzos, independientemente de su diversa motivación, tendientes a mejorar las condiciones de vida de las personas ancianas de nuestra ciudad.
Más allá de las creencias religiosas particulares, el reconocimiento de la dignidad de las personas y por ende el respeto de sus derechos fundamentales, es un imperativo ético fundamental y urgente.
En efecto, la exigencia ética de reconocer y respetar los derechos de los demás, en este caso de las personas ancianas, con frecuencia olvidadas vilipendiadas, no nace del hecho de ser creyente o no, sino de la condición simplemente humana de querer ser una persona auténtica y cabal.
Para quienes profesamos en concreto la fe cristiana, el sentido moral de la vida brota de una motivación que no es teórica, sino que sobretodo, es un fundamento y estimulo para la acción. Esto es, parafraseando el mensaje del Nuevo Testamento, podemos decir, cristiano: "muéstrame con fe tus obras".
Permítaseme citar la Carta Pastoral del Señor Cardenal Norberto Rivera Carrera que dio a la comunidad católica y a todas las personas de buena voluntad que deseasen escucharlo y sumarse a sus propuestas, con ocasión del día 28 de agosto, día de la ancianidad, en el año 1999.
"El impulsar una nueva cultura de la tercera edad, de manera creativa y transformadora, puede ser una renovada oportunidad para trabajar en muy diversos campos por la superación de la ancestral desigualdad social que atraviesa nuestra historia y que, sin duda, continúa en la actualidad como aguijón de nuestra conciencia ya que es el síntoma más inequívoco de nuestra debilidad ética y espiritual y del antitestimonio que damos los cristianos.
La pobreza es señal de desigualdad, de desequilibrio, de injusticia. De entre los pobres, sin duda, que los rostros de los ancianos, cada vez por cierto más numerosos, son de los rostros más vulnerables ante las diversas circunstancias que afectan a los pobres.
Hacer cultura, o mejor dicho, recrear la cultura de la tercera edad, significa para la iglesia solidarizarse con la causa justa de la lucha por los derechos de los ancianos más pobres, los olvidados, los doblemente excluidos, por su pobreza y por su condición de ancianidad".
Que nuestra presencia aquí sea la expresión de este propósito solidario y de este compromiso. Muchas gracias.
PONENCIAS
"La Asistencia Social y Psicológica del Adulto Mayor"
MA. ROSA MARQUEZ CABRERA
Directora General del Instituto de
Asistencia e Integración Social
SECRETARÍA DE DESARROLLO SOCIAL
Instituto de Asistencia e Integración Social
GOBIERNO DEL DISTRITO FEDERAL
México. La Ciudad de la Esperanza
"No se puede vivir la tarde de la vida con los preceptos de la mañana"
Los avances en la ciencia médica han permitido prolongar la expectativa de vida del hombre y en consecuencia que exista una creciente población de adultos mayores, sin embargo el reto actual es crear las condiciones para que los hombres y las mujeres puedan envejecer con dignidad y con una buena calidad de vida.El envejecimiento poblacional constituye el cambio demográfico más trascendental que enfrenta el mundo en el nuevo milenio y concomitantemente el bienestar de la población anciana deberá ser una de las prioridades de la sociedad actual. Mientras que en el siglo pasado el principal problema de salud pública fue la supervivencia de la población, en el presente, la mayor preocupación es la calidad de vida. Lo anterior debido a que el crecimiento económico no ha ido a la par con las circunstancias y demandas de la sociedad, lo cual exige un ajuste en las políticas económica y social de los distintos gobiernos, las cuales respondan a las necesidades de los grupos con mayor vulnerabilidad y entre estos el de los adultos mayores.
Particularmente en la sociedad mexicana existen dos problemas que hay que atacar en torno a la población de adultos mayores. Por un lado la escasez de empleo y la marginación de la que es objeto el anciano, y por otro el maltrato y el desplazamiento de este grupo de las esferas de integración, como son la laboral, familiar, política, y cultural. Como una respuesta pronta a estos dos planteamientos, la presente administración del Gobierno del Distrito Federal ha planteado diversas estrategias dirigidas a resolver el problema de fondo y estas convergen en regresarle al adulto mayor el potencial productivo en todos los niveles de sociabilización, enriqueciendo a estas personas con los rasgos propios de la creatividad: Entusiasmo, flexibilidad, frescura, visión, esperanza, apertura, alegría productividad, gusto de vivir y vivencia de poder, lo cual no sólo resolverá el problema de vulnerabilidad de este sector sino que incluso deberá se en el motor que reactive la economía y a la sociedad en su conjunto.
El reto del gobierno del D.F. con relación a la asistencia social es romper con las antiguas prácticas de asistencialismo derivando en un sistema de integración donde el adulto mayor (junto con otros grupos vulnerables) se encuentre en mejores condiciones de competitividad y existencia. El adulto y la adulta mayor actualmente no sólo sufren carencias económicas, lo más crítico lo experimentan en los ámbitos social y familiar, la prueba esta en que el adjetivo "viejo" tiene una connotación de inutilidad, lo cual trae consigo un deterioro en la imagen y autopercepción de sí mismo. No es difícil imaginar que las alteraciones en el carácter y la personalidad en el adulto mayor sean producto no únicamente del proceso involutivo sino del contexto psicológico estresante que le rodea. Paralelamente a los cambios biológicos, el envejecimiento conlleva cambios psicológicos en la atención, inteligencia, memoria, en las actitudes, en las motivaciones, en la capacidad de aprendizaje y en la percepción.
Actualmente ser viejo y/o sentirse viejo es sinónimo de inutilidad. Con el sentimiento de inutilidad viene el miedo al porvenir y por ende se entra en un conflicto con la sociedad, aquella no valoriza al anciano y él no la acepta, ya que para él esa sociedad no es la suya. Fácilmente acabara temiendo a la muerte y temiendo a la vida. De lo anterior podemos sustraer que el verdadero mal del envejecimiento no es la decadencia del cuerpo sino la indiferencia del espíritu. En este sentido tenemos que reconocer que la edad tiene menos importancia en el sostenimiento de las capacidades cognitivas de la persona puesto que surgen nuevas capacidades que mejoran o equilibran la involución natural, por ejemplo, si bien es cierto que con el tiempo se ve afectada la capacidad de memoria en el individuo, hay una compensación en el adulto mayor en cuanto a la serenidad y en la buena capacidad de juicio. De lo anterior hay que convencernos, y permitir que los adultos mayores tengan la posibilidad de demostrarlo y se acepte que la vejez antes que un número de años debe ser una actitud ante la vida.
En el adulto mayor cuando la pérdida de la autoestima llega a ser tal que en vez de amor al propio "yo" hay horror hacia sí mismo, es probable que se desencadene una depresión tan grave que pueda dar origen a la demencia, que no es otra cosa que la forma en la que el individuo niega la realidad que lo lastima; en otras palabras es un mecanismo defensivo extremo para quien no puede soportar la cruel realidad. Nuestro reto en la asistencia social es generar las condiciones para que los adultos y las adultas mayores se reconcilien con la sociedad generando un ambiente favorable de reincorporación venciendo los obstáculos de las pugnas entre las generaciones.
Las patologías mentales en la ancianidad se generan de acuerdo con la organización psíquica personal de cada individuo y los estilos particulares de enfrentar los problemas; así el aburrimiento, el aislamiento y el ocio son los factores desencadenantes de frecuentes desviaciones neuróticas. A este respecto en las diferentes Instituciones de Asistencia del G.D.F. se busca integrar a los adultos mayores en programas que coadyuven al fortalecimiento y mantenimiento de sus capacidades cognitivas y estabilidad emocional. (v.g.) este año se aplico a la población del Centro de Asistencia e Integración Social para Adultos Mayores "Cuautepec" un inventario que detecta los síntomas depresivos en Adultos Mayores institucionalizados y contrariamente a lo que esperaba se obtuvo un bajo índice de casos con distimia o cualquier otro tipo de depresión. Lo anterior se ha logrado integrando a los usuarios y usuarias en diferentes actividades de tipo ocupacional y recreativo, participándolos de eventos culturales, políticos y sociales y finalmente incluyéndolos en los programas de apoyo económico y productivo que ha promovido el gobierno del D.F. con miras a una potencial reincorporación
Algunos expertos han señalado al envejecimiento como un proceso que inicia con la concepción y dura toda la vida, por lo cual es necesario conocer al respecto, no sólo los aspectos biológicos, incluyendo los vinculados con la herencia, sino también la influencia del medio ambiente y especialmente de los factores emocionales relacionados con la salud mental, el estilo de vida y las implicaciones culturales de cada individuo, lo cual exige un abordaje multidisciplinario para el estudio del Adulto Mayor, actualmente llamado con toda justicia Adulto en Plenitud.
A principios del siglo pasado surge la Gerontología como una disciplina que pretende integrar los conocimientos de ramas como la medicina, enfermería, psicología, economía, derecho, arquitectura, etc., que convergen hacia un solo objetivo "El envejecimiento, sus causas, efectos y consecuencias en el ser humano". Derivándose cuatro grandes paradigmas: la biología del envejecimiento; los procesos patológicos (creándose una nueva rama de la medicina La Geriatría); los cambios psíquicos que traen consigo la involución física del organismo, aquello que viene como consecuencia de la declinación en las capacidades de actividad y recreatividad que originan el carácter tan especial del adulto mayor con tendencia franca a la depresión y que a su vez se convierten en factores aceleradores de envejecimiento. En la actualidad está perfectamente demostrado que los factores psicológicos conductuales e intelectuales son más decisivos que la edad misma, tanto en el envejecimiento como en la calidad de vida. Factores psicológicos negativos como las tensiones, inactividad, marginación, rechazo, problemas económicos, y el estrés derivado, afectan la calidad de vida y aceleran la involución del organismo. Por el contrario, llevando una vida física y mental activa, participativa de las acciones y decisiones en lo cotidiano y en lo importante, el apoyo de una red familiar y social preparada, plenifica las capacidades cognitivas del adulto mayor, mejorando no sólo la autopercepción sino inclusive coadyuvando a la integración de un sistema social más productivo, incluyente y justo; finalmente el cuarto paradigma, que esta muy vinculado con el anterior, se trata de la integración y participación del adulto mayor en la sociedad incluyendo las esferas económicas, jubilatoria, jurídica de vivienda, alimentación, ocupación, seguridad social, asistencia entre otras. El adulto mayor por su "aparente pérdida de actividad y capacidad productiva" ha sido marginado y desplazado socialmente haciendo de este sector de la población el más pobre y dependiente. Actualmente la Gerontología no esta preocupada por explicar el proceso del envejecimiento digno y productivo, en tanto que considera indispensable resarcir el valor de la salud y la riqueza material e intelectual del Adulto Mayor. A esta labor de la gerontología debemos unirnos gobierno y sociedad para enfrentar el reto antes mencionado del envejecimiento demográfico de la población a nivel mundial, hay que recordar que las acciones que se emprenden en el presente serán pilares de una sociedad sana en el mañana.
El conocimiento que se ha aquilatado hasta el momento, sin duda, ha permitido mejorar la etapa final de muchos ancianos y ha contribuido a que en algunos países hayan logrado conjuntar cantidad y calidad de vida de sus habitantes, sin embargo, aun son muchos más que deben trabajar para hacer frente al reto de una población que envejece aceleradamente, tal es el caso de México. Esta empresa representa, sin duda un gran reto a vencer y requiere un trabajo perseverante y multidisciplinar.
Para concluir me gustaría precisar algunas consideraciones con respecto al adulto mayor y las adultas mayores.
1.- La vejez es una realidad muy humana pero también es la ocasión de plenitud en la persona.
2.- En el mundo actual, volcado hacia el futuro, la experiencia que es la voz del pasado, vale muy poco; sin embargo es la riqueza que habrá de resolver la problemática actual de cara al mañana.
3.- La serenidad, creatividad y sabiduría son cualidades que sólo el adulto mayor puede ofrecer a la sociedad.
4.- Los adultos mayores conservan sus facultades mentales, siempre y cuando subsista en ellos el interés y la aplicación.
"RECREACION, CULTURA Y DEPORTE EN EL ADULTO MAYOR"
SINTESIS DE LA PONENCIA
María de la Luz Herrera
Enfermera Geronto-geriatra
Beneficios en el adulto mayor
La recreación en el plano fisiológico ha demostrado que el entusiasmo libera endorfinas, que la creatividad aumenta el consumo de oxígeno, activa la circulación y eleva la fuerza muscular.
La recreación es imprescindible para la salud física y mental del individuo y requiere ser vista como tal, intenta promover la ocupación del tiempo libre con la práctica de actividades múltiples que contribuyen a la socialización e inserción del adulto mayor en el campo de las relaciones humanas y tratar de evitar el sedentarismo, la frustración y la depresión.
Hay actividades recreativas de distinta índole: al aire libre como campamentos, artísticas como música, canto, baile, pintura, escultura, etc.; actividades sociales como juegos de mesa, lectura, etc.; actividades de acondicionamiento físico como la natación, caminatas, etc.; actividades manuales y artesanales, entre otras.
Existen actividades para fortalecer y/o mejorar las funciones mentales como:
Las que fortalecen la memoria a corto plazo, como la lectura comentada, análisis de películas, recopilación y práctica de refranes, etc.
Las que ayudan a mejorar las funciones visoespaciales como la pintura, el dibujo, juegos de destreza, etc.
Las que ayudan a mejorar las habilidades perceptivas, se pueden realizar acuarios, terrarios, visitas a museos, etc.
Las que fortalecen las actividades psicométricas son la caminata, la bicicleta, rompecabezas, etc.
EJERCICIO FISICO
Por todos los beneficios que genera en el ser humano la práctica de algún deporte o rutina de ejercicios, es necesario que lo tratemos en un aparato especial.
La rutina de ejercicios o la práctica de algún deporte ayuda a mantener la funcionalidad y autonomía en el adulto mayor.
Dentro de los beneficios que proporciona el ejercicio podemos mencionar:
- Beneficios físicos: ayudan a regular la tensión arterial, retardan la pérdida de calcio, mejoran la función intestinal, ayudan a regular los niveles de colesterol en la sangre, etc.
- Beneficios psicoafectivos: mejoran la autoestima, preservan la autonomía, mejoran el estado sueño-vigilia, ayudan al tratamiento de la ansiedad, etc.
- Beneficios sociales: evitan el aislamiento, fomentan la participación de actividades sociales y en grupo, etc.
Para que la actividad física y el ejercicio tengan el efecto deseado es necesario cumplir con ciertos requisitos:
- El efecto del ejercicio es pasajero; esto significa que el ejercicio y la actividad física deben practicarse de manera regular y constante par lograr un efecto sostenido.
- El ejercicio y la actividad física deben hacerse con mayor intensidad y esfuerzo que las actividades habituales.
- Si alguna circunstancia lo obliga a llevar una vida sedentaria, es necesario realizar por lo menos de 30 a 40 minutos diarios de caminata o por lo menos 4 días a la semana.
PONENCIA
LA CULTURA Y LA RECREACION EN EL ADULTO MAYOR
Lic. Gustavo García Silva
Jefe de la Unidad de Atención al Adulto Mayor, en la Delegación. Cuauhtémoc
Clasificación de actividades del tiempo libre
- Por actividad pueden ser: físicas, psíquicas y sociales.
- Por su naturaleza: deportivas, educacionales y artesanales.
- Por el grado de participación: individual, grupos y masas.
Lo positivo y lo negativo del tiempo libre.
Positivo: descanso, educación, cultura, desarrollo personal, expresividad y relaciones satisfactorias.
Negativo: tiempo a llenar, consumismo, dirigismo político y relaciones conflictivas.
Condiciones de los sujetos
Positivo: salud, autonomía personal, personalidad positiva, intereses amplios, madures activa, residencia, céntrica, status económico aceptable y pensión suficiente
Negativo: limitaciones físicas y psíquicas, personalidad negativa, intereses restringidos, madurez frustrante, residencia aislada, bajo status económico y pensión insuficiente.
Actividades físico recreativas
Juego: actividad que se apoya en la necesidad de movimiento del hombre, se manifiesta de manera espontanea en la búsqueda de satisfacciones internas.
Recreación: actividad física o mental que se realiza por iniciativa propia y aligera las tensiones emocionales, mejora la salud y la aptitud física, además de que aumenta la productividad moral.
Características básicas de la recreación
- De elección propia.
- Satisfacción inmediata y directa.
- Proporciona la oportunidad de autoexpresarse.
- Diversión.
- Descanso (acto/pasivo)
- Desarrollo de la personalidad
- Darse en el tiempo libre.
Valores de la recreación
- Para que se de la recreación debe haber un margen de libertad interna y externa.
- La recreación de hábitos que afirman la vida y que son lo opuesto de los vicios.
- La acción recreativa debe tener un fin en sí misma.
- Una autoexpresión, una oportunidad de manifestarse, una condición básica para la realización humana.
- No a la búsqueda de placer sino a la satisfacción y goce placentero.
La vida tiene cuatro caminos principales a través de los cuales desea expresarse en la persona: trabajo, juego, culto y amor.
Cultura
La cultura aporta al hombre el medio de adaptarse a las complejidades del mundo en que nació, dándole el sentido, y algunas veces la realidad, de ser creador de ese mundo, al mismo tiempo que criatura de el.
El adulto mayor en la cultura
En las culturas tradicionales se consideraba al adulto mayor, en un lugar preponderante en el núcleo social y familiar, el era el puntal dentro de la familia. Muchas decisiones familiares y comunitarias, giraban en torno a su opinión. Era venerado y respetado, por su experiencia y sabiduría.
EB Tylor: cultura es un conjunto complejo que incluye el conocimiento, creencias, arte, moral, ley, costumbre, además de capacidades y hábitos adquiridos por el hombre como miembro de la sociedad.
La idea popular de cultura la tenemos en lo que podríamos llamar una definición escolar y equivale a "refinamiento".
Cultura en términos psicológicos
Cultura es la porción aprendida de la conducta humana. Cualesquiera que sean las formas susceptibles de descripción objetiva que constituyen una cultura, deben ser aprendidas por las sucesivas generaciones sino corren el riesgo de perderse.
Los medios de comunicación como creadores de cultura
Los medios de comunicación como lo son: la televisión, la radio, la prensa, etc. Han propiciado el cambio de la concepción del adulto mayor. Los estereotipos de: enfermo inútil, caduco son cada día más difundidos. En los medios se venden las imágenes de belleza y progreso relacionadas solo con los jóvenes y lo productivo, enfocado solo desde esa perspectiva.
La cultura se transmite
La mayor parte de la cultura en todos los grupos humanos se adquiere mediante un proceso que se denomina indistintamente habituación, imitación, condicionamiento consciente, expresión, etc.
La cultura en el adulto mayor
Las actividades culturales permiten:
- Recrear el espíritu.
- Mantener y fortalecer la atención, desarrollo de las potencialidades tanto físicas como mentales y espirituales.
- Conocer el ámbito en el que se desenvuelve y manejar los elementos que le permitan transformar el contexto.
- Coadyuvar el entendimiento del entorno que le rodea y posibilita la relación con los demás.
- Incentiva los deseos de vivir y propicia el desarrollo físico y psíquico.
CLAUSURA DE LAS SEGUNDAS JORNADAS DE LOS DERECHOS HUMANOS DE LAS PERSONAS ADULTAS MAYORES
Gerontólogo Juan José Perdomo Salgado
Presidente de la Asociación de Jubilados y Pensionados Dr. Lavista, A.C.
Miembro del Comité Organizador
Distinguido auditorio, invitados y autoridades, compañeros y compañeras
Es de gran satisfacción su asistencia a estas segundas Jornadas por Nuestros Derechos a la Seguridad, Salud, Vivienda, Alimentación, Educación, Cultura, Recreación, Convivencia Social y Familiar; de Capacitación y el Trabajo.
Debemos de participar en la formulación de leyes, de las políticas públicas y sociales, que traten de resolver la problemática que conlleva al transcurrir de muchos años de trabajo, de formar una familia y el de contribuir al desarrollo de nuestro país.
Hoy nuestros gobernantes y representantes legislativos empiezan a comprender que la población envejece a grandes pasos y que se deben de promulgar leyes y medidas resolutivas para enfrentar este acontecimiento no tomado en cuenta.
Con la disminución de nacimientos en cincuenta años más del 40 por ciento de la población será mayor de sesenta años, por lo que se reducirá la mano de obra.
¿Quién los sostendrá económicamente?, ¿Quién les dará la atención de salud, alimentación y de servicios a esta población creciente de viejos?
Solamente que los gobiernos, la sociedad civil y la iniciativa privada en conjunto realicen programas viables y acordes a las necesidades de este sector, con leyes, recursos económicos, producción y asistencia social.
Estas jornadas continuarán para darles conocimientos gerontológicos, geriátricos, para que conozcan sus derechos y de lo que se está haciendo a nuestro favor.
Para el próximo año nos esperan muchas actividades, entre otras, foros, encuentros, congresos y nuestras propias jornadas.
También esperamos tener una Ley de Adultos Mayores del Distrito Federal modificada y reglamentada, una ley nacional y otra para el INSEN.
Dado el interés de las Cámaras Legislativas sobre la Tercera Edad de darle protección y marco jurídico, se ha realizado un acuerdo bicameral para emitir estas leyes. Como ven hay avances y sensibilidad hacia nosotros, por lo que se promoverá la cultura del envejecimiento en todos los niveles, se iniciará el cambio de imagen y de avances a nuestro favor para que aterricen en objetivos específicos que lleguen inmediatamente a los Adultos Mayores.
Por lo que les pido que estén atentos y que participen en estos acontecimientos y que unidos y en pie de lucha logremos lo que nos corresponde por derecho, por ser ciudadanos activos y productivos. Que se borre la imagen y el trato como viejos inútiles, bailadores y farmacodependientes.
Nosotros somos los guardianes de las tradiciones, de la cultura, y del folclore de la identidad de un país de mezcla indígena y española como nuestro México.
A nombre de este Comité Organizador les doy las gracias por su presencia y participación en estas Segundas Jornadas del Distrito Federal.
Siendo las 13:30hrs. del día 19 de Octubre del 2001, se dan por clausuradas estas Segundas Jornadas por los Derechos de las Personas Mayores.
POR UN MÉXICO PARA TODAS LAS EDADES