La Jornada
México, 16.06.2006
De aplicarse una pensión a todas las personas mayores de 65 años en América Latina se requerirÃa destinar el equivalente a 2.2 por ciento del producto interno bruto (PIB) de la región. Pero si se focalizara hacia quienes más la necesitan bajarÃa a 0.9 por ciento, informó en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Juan Carlos Moreno Brid, de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en México.
Al dictar la conferencia magistral El reto de la protección social en América Latina, en el auditorio Dr. Raúl Fournier Villada, de la Facultad de Medicina de la UNAM, se pronunció por una nueva protección social que tenga vocación universal, eficiencia, eficacia y solidaridad.
Se requiere de una nueva seguridad colectiva, porque aunque haya crecimiento económico en la región, no hay manera de que se logre un desarrollo incluyente para los latinoamericanos. Además, debe tener viabilidad polÃtica, financiera e institucional, agregó.
"No estamos hablando de un cambio en algunas reglas. Este es un reto polÃtico, financiero e institucional, y tiene que ver con una visión de universalidad, eficiencia y solidaridad, al localizar las discriminaciones en el acceso a la protección social", afirmó.
Comentó que para que se propicie este nuevo sistema en América Latina, es indispensable un pacto social, un acuerdo entre agentes que se base en las garantÃas esenciales, como a la vida, y a cierto bienestar económico y social. Reconocer, al interior de las sociedades, cuáles derechos explÃcitos se van a avalar y a exigir.
Durante su participación en el simposio Hacia la universalización de la salud y la seguridad social, el integrante de la Cepal sostuvo que se requieren acuerdos polÃticos, instrumentos que concreten y coordinen la oferta de servicios; asà como un pacto fiscal que determine cómo se distribuyen los recursos en los diferentes paÃses de la región latinoamericana.