Desde 2001, se promueve el bienestar psicológico y social de los y las adultas mayores trabajando en la construcción de nuevas representaciones sociales de la vejez a través de cursos, programas de voluntariado, exposiciones, entre otras actividades.
Natalia Muñiz
Diario Popular, 15 de abril de 2018.
Más de cien cursos para personas adultas mayores y seis programas de voluntariado, dos de ellos con convocatoria abierta a todo público, se llevan adelante en el Centro de Promoción del Adulto Mayor (CEPRAM) de la provincia de Córdoba.
Desde 2001, la asociación civil promueve el bienestar psicológico y social de los y las adultas mayores trabajando en la construcción de nuevas representaciones sociales de la vejez a través de cursos, programas de voluntariado, exposiciones, entre otras actividades.
El director del CEPRAM, el Doctor en Psicología y Master en Gerontología Social Andrés Urrutia, señala que a lo largo de los años “cambian los contenidos” de los cursos “pero las connotaciones que moviliza a las personas mayores son las mismas, la generación de vínculos, el estar con otros”.
Cuando los adultos mayores tienen proyectos “se sienten mucho mejor y los cursos, las instituciones educativas son un medio para eso, para socializar, que te acompañen en esta parte de la ruta”.
Y asegura que “hay un punto en donde si no se logra esto (generar vínculos, redes) es como que el curso solo no alcanza”.
En el CEPRAM se dictan clases para personas mayores de 50 años. Hay más de cien cursos de las áreas: Cultura, historia y política; Expresión y Lenguajes; Bienestar psicológico; Cognición; Bienestar físico; Idiomas; Tecnologías.
Acerca de las clases de mayor convocatoria, Urrutia explica que “han cambiado mucho, antes eran las de iniciación a la informática y ahora son las de uso de celulares”.
También comenta que “siguen convocando mucho los cursos de Psicología, manejo de las emociones, arte y psicoanálisis, porque es la impronta que tenemos, pero hay de pintura, baile, teatro”, entre otros.
Asimismo se reflexiona sobre esta etapa del ciclo de la vida. Señala que “muchas veces ( a los alumnos) les caen las fichas, realizan revisiones de su vida o atan cabos sueltos con los hijos o demás familiares, resignifican esta etapa, comprenden situaciones, se perdonan. Se trabaja mucho para envejecer bien”.
Programas
Por otra parte, la asociación civil tiene seis programas de voluntariado. Cuatro de ellos destinados solo a alumnos y alumnas del CEPRAM: Cibervoluntarios; Fotorreporteros; Biblioteca; Equipo de Solidaridad. Mientras que la convocatoria a los programas de Acompañamiento Telefónico a Mayores (ATM) y Entre Cicerones y Herederos está abierta por primera vez al público en general, residente en la ciudad de Córdoba.
El ATM es una iniciativa que comenzó en 2003, un espacio de escucha y comunicación atendido por voluntarios. Cuentan con una línea telefónica gratuita (0800-444-4433) y otra local (0351-451-0100). “Es un acompañamiento (telefónico) a personas mayores que están solas, angustiadas, que tiene pocas redes sociales o pasan situaciones de abandono o tienen mucha fragilidad”, explica Urrutia.
En tanto, mediante el programa Entre Cicerones y Herederos, las personas voluntarias relatan historias de los sitios patrimoniales de Córdoba a los alumnos y alumnas de las escuelas primarias. Los recorridos se realizan en el sitio fundacional (Plaza San Martín, Cabildo, Catedral) y en la Manzana Jesuítica (Iglesia de la Compañía de Jesús, Colegio Nacional de Monserrat y Museo Histórico de la Universidad Nacional de Córdoba).
La sede del CEPRAM está ubicada en David Luque 430, barrio General Paz, Córdoba; tel. (0351) 453-3471; www.cepram.org.ar.
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