“En este aislamiento preventivo obligatorio no estamos apelando al concepto de marginalidad, sino al de discriminación a las personas mayores de 70 años, y al hecho de que su tratamiento sea distinto al del resto de la población”.
Así lo señaló Humberto de la Calle, ex vicepresidente de la República, exministro de Estado y negociador del Acuerdo de Paz con las FARC, uno de los invitados a la tertulia “La rebelión de las canas: una mirada desde las ciencias sociales”, organizada por Asociación de Profesores de la Universidad Nacional de Colombia (APUN).
En el evento virtual, los asistentes e invitados dialogaron sobre algunas posiciones de las personas mayores de 70 años ante las medidas de restricción a las que están sometidas en el marco del confinamiento por la pandemia, representadas en esta ocasión por el doctor De la Calle y por el sociólogo Víctor Reyes Morris, profesor de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL).
La tertulia se dio a raíz de una publicación del profesor Reyes en el blog Ciencias Sociales, del diario El Espectador, en la cual hacía alusión a la rebelión y revolución ocurrida en varias partes del país y del mundo a causa de la inconformidad creciente con la cuarentena obligatoria extendida para los mayores.
Controversia generacional
En palabras del profesor Reyes, “el confinamiento impartido por el Gobierno equivaldría casi que a seis meses de pena mayor que para la demás población, decisión que ha generado mucha controversia, al menos para los que estamos cobijados bajo la etiqueta de abuelitos”.
El docente agrega que el confinamiento universal de los mayores es claramente una restricción a la libertad de circulación, que vulnera el artículo 13 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y el artículo 24 de la Constitución Política del país.
Según el doctor De la Calle, las críticas y la “rebelión” de los mayores detonan por un defecto comunicacional por parte del Gobierno: “en esencia, esa primera cara del problema indica que para nosotros –la población más vulnerable ante la situación– el Estado se toma la prerrogativa de protegernos, aún en contra de nuestra voluntad”.
También se refirió al hecho de que sean los mismos familiares quienes están contagiando de COVID-19 a los mayores, por lo que indicó que, en tales condiciones, de nada sirven las medidas de confinamiento obligatorias para esta población.
Por otro lado, la profesora Alejandra Sánchez, vicepresidenta de la Asociación Colombiana de Universidades (Ascún) –cumpliendo el papel opositor en la tertulia–, cuestionó la idea de marginalidad y discriminación hacia las personas mayores argumentando que actualmente ellos son los principales protagonistas de cargos importantes en el país, aún en medio de la coyuntura a causa de la pandemia.
Señaló además que los mayores de 70 años son quienes menos adquieren el virus de COVID-19, pues, según las estadísticas, las personas que más están infectadas están entre los 20 y 40 años.
“Los mayores se infectan menos precisamente por las restricciones. Sin embargo, es la población que produce el mayor número de fallecimientos. Eso quiere decir que no ha sido suficiente con tenerlos confinados, porque otros son los responsables de contagiarlos; pero si todas las personas mayores estuvieran sin restricción, las consecuencias podrían ser peores”, sostuvo.
La jornada también contó con una importante interacción por parte de los asistentes, quienes con sus preguntas participaron de forma dinámica en la tertulia.
Fuente: Agencia de Noticias UN - 23/06/2020
http://agenciadenoticias.unal.edu.co/detalle/article/adultos-mayores-discriminados-en-medio-de-la-pandemia.html